Despedimos 2023 y todo lo positivo en el mundo del cine y espectáculo. Ya nos tomamos nuestro tiempo en destacar lo bueno que vimos en el año, ahora es momento de entretenerse mencionando lo que nadie nunca va a recordar. Proyectos tan malos que decepcionaron a espectadores o que simplemente fallaron en cumplir las expectativas generadas por su publicidad. Es la historia del Ying y el Yang, en donde no puede existir la elite cinematográfica sin tener un bote de basura listo para ser reciclada. A continuación, una humilde y trágica lista. 

Películas:

Caballeros del Zodiaco

La historia no miente. Cada intento de hacer un live action o película recopilatoria de Saint Seiya fracasa rotundamente y este intento hollywoodense de interpretar la historia de Masami Kurumada no es la excepción. Una película que intentó traer la vida de Seiya a la actualidad, en donde los potenciales Caballeros son cazados por unos androides con cosmos que quieren absorber la sangre de los elegidos para ser los más poderosos del mundo. No solo reescribe toda la historia de la obra, sino que falla en explicar todos los elementos básicos de su trama. Malas peleas, poco desarrollo, efectos especiales que llenan la pantalla de luces innecesarias y un protagonista (Mackenyu) que tiene el carisma de un moai. La guinda de la torta es que no vemos la famosa armadura de pegado hasta el final de la cinta, cuando ya lo único que queremos es alejar la mirada de la pantalla.   

Ant-Man & The Wasp: Quantumania

Era la película que prometía dar el puntapié inicial de la nueva etapa del MCU. Una cinta que debía arreglar el pobre desempeño de Marvel en su fase 4 y levantar el ánimo de una fanaticada cada vez más exigente. Pero nada de eso ocurrió. En su lugar vimos un largometraje sin alma, repleto de pistas sobre futuros proyectos que no tenían ninguna relación con lo que estábamos viendo, con chistes malos y repetitivos, un CGI que generó burlas por internet y una historia poco creíble dentro de lo que, se suponía, era un universo lleno de posibilidades. Paul Rudd fue lo único que sostuvo este desastre, uno que quemó por completo al personaje de Ant-man. Como si fuera poco, este filme servía como la introducción definitiva de Kang, el Conquistador, el próximo gran enemigo de Los Vengadores y terminó el año con Jonathan Majors despedido luego de la acusación y condena por violencia de genero en contra de su antigua pareja. Fue el inicio y el fin de Marvel en 2023. 

Fast X

Es un tanto raro hablar de Rápido y Furioso como una de las peores películas del año tomando en cuenta que ya abandonaron toda cordura en relación al proyecto. Pero, de alguna forma, con esta cinta se superaron. 

Fast x olvida todo lo positivo de años anteriores y decide hacer un refrito de todos los personajes que alguna vez compartieron pantalla con Dominic Toretto, ¿por qué? Porque son FAMILIA. No importa que un enemigo haya intentado matar a todo conocido de Dom en el pasado, ahora son parte del grupo y van a arriesgar todo para salvar a su FAMILIA. La acción es buena, pero sin sentido. Llueven balas cuando no es necesario, personajes que eran sanguinarios ahora son infantiles, regresan amigos que creíamos desaparecidos sin ninguna explicación más allá del “tengo que cuidar a los míos”. Lo único rescatable es Jason Momoa en un papel de psicópata que, dentro de todo lo malo, resulta creíble cuando vez que todo lo que rodea esta cinta es ridículamente exagerado. ¿Lo peor? El desenlace presenta uno de los peores cliffhangers de los últimos años, en donde nadie, absolutamente nadie, puede mostrar preocupación por la posible muerte de Dom.  Se vienen la secuela, lamentablemente. 

Ghosted

Uno esperaría que una película que es distribuida por Apple TV+ demuestre una calidad excepcional. Más todavía cuando vemos un elenco repleto de talento con Ana de Armas, Chris Evans y Adrien Brody en los papeles principales. Sin embargo, lo que vimos en pantalla fue el vivo ejemplo de que un mal guion puede hacer estragos sin importar la calidad de los actores. Ghosted es el intento contemporáneo de recrear Mentiras Verdaderas con un giro en su trama. Es una comedia romántica que, más que romance, se ve como una obsesión tóxica por parte de la pareja principal. Un dúo que tiene tan poca química que duele ver cada interacción que tienen en pantalla. No es broma, los primeros 15 minutos de película, los que presentan a los protagonistas, son tan inverosímiles y llenos de “cringe” que uno aparta la mirada por la vergüenza ajena que provoca. Intentaron solucionarlo metiendo a cada actor popular que pudieron encontrar para que tuviera 2 minutos de pantalla para contar un chiste malo. No funcionó. Hay más química en un balde de arena. 

Rebel Moon (Parte Uno): La Niña del Fuego

Zack Snyder llega con esta fantasía espacial que prometía iniciar una nueva saga cinematográfica a la altura de otros clásicos como Star Wars, Fundación, Battlestar Galáctica o Star Trek. ¿El resultado? Un pastiche de todo lo anterior que carece de cualquier identidad propia, sumado a los eternos vicios del realizador, como el exceso de slow motion y una construcción de personajes deficientes. De alguna forma se las ha ingeniado para mantenerse en el top de Netflix, pero nos parece sospechoso tanto apañe a una cinta que ha sido casi unánimemente criticada. Lo peor es que ya hay rumores de un Snyder Cut. Cerremos por fuera.

Series:

The Witcher, temporada 3

Mira cómo masacraron a mi muchacho. Todo lo que Henry Cavill logró levantar con su interpretación de Geralt se fue al tacho de la basura debido a los cambios que los showrunners quisieron hacer. The Witcher ya había tenido una segunda temporada para el olvido luego de que el destino de la serie optara por alejarse del material original sacado de los libros, algo que el propio Cavill catalogó como un grave error. Esta secuela optó por usar la primera parte de la temporada en arreglar los problemas de continuidad heredados, pero el daño era más del que podían solucionar. El tiempo perdido enmendando estos errores provocó que la serie acelerara u obviara ciertos elementos de la historia porque no quedaba más espacio para explicaciones ni batallas épicas. Todo lo llamativo de la construcción de mundo de The Witcher fue aniquilado y ahora todos los giros de trama ocurrían sin tener mayor explicación que “un mago lo hizo posible”. El resultado fue una serie tan mala que las quejas por la renuncia de Henry Cavill quedaron de lado ya que nadie, en su sano juicio, podría pensar que alguien va a querer invertir en una continuación. Láncenle una moneda al Brujo, que Netflix lo acaba de dejar sin trabajo. 

The Idol

Resulta muy difícil entender en qué estaban pensando las y los ejecutivos de HBO cuando le dieron luz verde a este proyecto. Lapidado por la crítica, por el público y por los colectivos feministas, debido a su trama sexista y carente de cualquier sentido. The Idol, producida por The Weeknd y el sobrevalorado Sam Levinson, se alza como la peor serio de HBO de la historia, principalmente porque NUNCA habíamos visto una serie que prefirieran derechamente dejar de transmitir (recordemos que la cerraron en 5 capítulos en vez de los 6 anunciados originalmente). Señor The Weeknd, dedíquese a la música, por favor.

Citadel 

Gran inversión y Prime Video son dos cosas frases que nunca deberían ir en la misma oración. Citadel es la serie de mayor presupuesto (300 millones de dólares) de la plataforma después del desastre de Los Anillos de Poder (500 millones) y prometía ser la próxima gran serie de espionaje con Richard Madden, Priyanka Chopra y Stanley Tucci a la cabeza. En su lugar, obtuvimos una serie repleta de clichés, lagunas argumentales, un guion que parecía ser más de comedia romántica que de espías y una agencia de inteligencia que, por lo que vimos en la temporada, nos deja en claro que no sería capaz de salvar a nadie. La serie anunció con bombos y platillos la contratación de los hermanos Russo en la dirección, lo que, para sorpresa de todos, terminó condenando el proyecto debido a diferencias creativas entre Joe Russo y Josh Appelbaum, guionista principal. A petición de Russo, la producción tuvo que volver a grabar escenas que ya tenían listas, lo que aumentó el costo del producto debido al pago extra a actores, equipo técnico y búsqueda de nuevas locaciones. Se siente la mano de los Russo al ver una serie bastante cinematográfica, pero no es suficiente como para solucionar los problemas de trama. Citadel nació muerta.  

Secret Invasion

¿Hay algo de Marvel que pueda rescatarse? Pregunto en serio. No hay ningún proyecto, salvo Loki, que uno pueda destacar como parte importante del universo que están desarrollando. Secret Invasion llegaba a las pantallas de Disney+ como la respuesta a un periodo oscuro de series con superhéroes poco reconocidos. Era la serie que presentaba al misterioso Nick Fury como protagonista junto a los Skrull que tanto habían mencionado en distintos momentos del MCU. Lamentablemente, el resultado fue paupérrimo. Podemos dejar de lado el que no haya sido popular en su estreno, algo que suele pasar con las series de Marvel. Lo que no se puede perdonar es la falta de contenido. Héroes que no quieren serlo, villanos poco creíbles, lagunas argumentales que nunca intentan explicar y una formula repetitiva que colma la paciencia. Se sabe que la habilidad metamorfa de los Skrull puede ser la base para engaños y revelaciones de impacto una vez que revelan su identidad, pero el que cada episodio tenga un caso similar es aburrido. Secret Invasion es tan poco relevante que puedes quitar la serie del catálogo del MCU y nadie se daría cuenta, salvo una que otra muerte que nadie recordará.

Animación:

Zom 100

Un anime que partió con un primer episodio casi perfecto. Un arte, animación y dirección que posicionaron a esta serie como uno de los estrenos más fuertes de la temporada de verano y que rápidamente terminó en el olvido. ¿Qué pasó? Problemas en la producción obligaron a retrasar el estreno de nuevos episodios a partir del quinto, situación que fue constante durante toda la temporada y que llegó a tomar una pausa indefinida ya que no sabían si iban a poder cumplir con las fechas. Es un anime de 12 episodios que comenzó en julio y que finalizó el 25 de diciembre con el lanzamiento de los 3 últimos capítulos al mismo tiempo. Nunca se informó sobre cuáles fueron los problemas que derivaron en esta situación, pero no deja de ser tragicómico que una serie que usa el abuso laboral de Japón como parodia termine fracasando por conflictos laborales. 

FLCL: Grunge

FLCL es un anime de culto. Una serie extravagante y alocada que tiene un lugar asegurado en la historia de la animación japonesa. Por lo mismo sorprendió cuando anunciaron otra secuela para este año, algo que los fanáticos nunca esperaron debido al fracaso de temporadas anteriores, pero que aun así se preparaban para recibir con los brazos abiertos… hasta que anunciaron que estaría hecha completamente por CGI. No es que esté mirando en menos la animación generada por computador, es solo que lo que hizo famosa a FLCL fue la forma en que su arte se sentía “vivo” dentro de la serie. Los movimientos de cámara, la velocidad de las secuencias y la forma en que interactuaban con los escenarios 2D. Todo eso se pierde en el momento en que tenemos a una imagen generada intentando copiar los gestos de su precuela. Para colmo, esta supuesta secuela no tiene relación con el FLCL original, lo que llevó a los fans a negar la existencia de este anime. 

Velma

Velma es la mejor demostración de que no todas las franquicias se pueden reinventar de manera exitosa. En el papel, la idea era buena: una serie que sigue a Velma de Scooby-Doo en una historia murder mistery con ella como protagonista. El problema es que la serie se lanza por un humor controversial que no termina por funcionar, y se las ingenió para ofender a un montón de comunidades que habían llegado a disfrutarla. Un desastre total.

Tokyo Revengers: Temporada 3

Un animé que fue la sensación del 2021 y que prometía alzarse como protagonista en sus próximas temporadas se ha ido diluyendo hasta el punto del desinterés total. Aquí es curioso, porque la calidad de la animación ha mejorado y se nota que está trabajada con cariño, pero el problema es que la historia ha dejado de dar el ancho por completo. ¿Culpa del mangaka o de la adaptación? Difícil saberlo, aunque de alguna forma se las han ingeniado para que una serie sobre viajes en el tiempo antojadizos logre llegar a un punto tan inverosímil que sea imposible tomársela en serio (y que vaya que la serie se toma a sí misma en serio).